| Encantamiento para producir fuego | |
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| Luz | Naranja y roja |
| Conjuro | Incendio |
| Tipo | Encantamiento Conjuración |
| Movimiento de mano | 
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| Efecto | Produce fuego |
El encantamiento para producir fuego, cuyo conjuro es Incendio, es un encantamiento que se utiliza para conjurar llamas sobre el objeto deseado, y así encender fuego.
Este encantamiento se enseña a los estudiantes durante su primer año en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, en las clases de Encantamientos (y es revisado durante el segundo año), así como en las clases de Herbología, para lidiar con el lazo del diablo y otras plantas peligrosas. También es revisado en quinto año por los estudiantes que van a tomar sus exámenes TIMO.
Efectos[]
Este encantamiento, como lo dice su nombre, sirve para conjurar llamas desde la punta de la varita sobre el objetivo, encendiéndolo fuego. Así, es muy útil para encender fogatas y estufas, así como provocar incendios.
Si bien es complicado, mediante este encantamiento es posible conjurar bolas de fuego para lanzarlas hacia una persona, por lo que puede ser útil en un duelo a modo de encantamiento ofensivo.
Etimología[]
- En latín, "incendio" es el singular dativo o ablativo de "incendium", que significa "fuego". Por lo tanto, el conjuro de este encantamiento funge como una forma de llamar al fuego para quemar el objeto deseado.
- "Incendio" es la palabra en español y portugués para señalar al "fuego". Asimismo, en italiano, la palabra "incendio" se refiere a un gran fuego.
- "Incendio" es también la primera persona del singular, del verbo "incendiar" en presente, que significa "prender fuego".
Curiosidades[]
- El encantamiento Lacarnum Inflamari es una versión del encantamiento para producir fuego, el cual sirve exclusivamente para encender en fuego a las prendas de vestir.
- Asimismo, el encantamiento Fiery es una versión más poderosa y ofensiva del encantamiento para producir fuego, el cual conjura bolas de fuego de gran tamaño que salen disparadas desde la punta de la varita (también puede aprovechar el fuego que ya existe alrededor para desprender de él bolas ígneas para atacar al oponente).